Nombre de usuario y contraseña
La correspondencia por correo electrónico suele contener información de carácter privado. Por ello, el acceso a los mensajes en el servidor de correo sólo es posible después de que el usuario haya iniciado sesión mediante un nombre de usuario y una contraseña.
Los datos de inicio de sesión los determina el propio usuario, pero no siempre. Por ejemplo, en el trabajo, el nombre de inicio de sesión lo asigna el empleador para que las direcciones de correo electrónico de los empleados tengan una forma uniforme. La contraseña debe ser segura (con una combinación de letras mayúsculas y minúsculas, números y caracteres especiales) y no debe tener un significado específico, especialmente no predecible a partir de la información comúnmente disponible sobre el usuario. Así que el nombre de su pareja, su fecha de nacimiento y su deporte favorito no son la mejor opción para proteger su correo electrónico.